Pues bien, este restaurante situado en el céntrico barrio de la Latina en Madrid, es denominado como el mejor restaurante mexicano de Madrid, y no solo por la comunidad en internet, sino por la opinión prestada de varios compañeros mexicanos que la califican de casi perfecta!
Mientras que este restaurante sobresale con nota en la comida, estropea su reputación y su imagen con un cutremente adornado y pequeño local. Con apenas un puñado de mesas atendibles fácilmente por uno o dos camareros, más te vale reservar con un par de semanas de antelación si pretendes tomar algo en este restaurante.
Os hablaré de mi experiencia en él: Fuimos a este restaurante sin reserva, pues 4 días antes lo había intentado sin éxito. Al llegar a las 21:15 al lugar, observamos como en el local ya no cabe ni un alfiler, pues habría unas 30 personas cenando. Decidimos esperar para ver si había suerte, y nos tomamos unos margaritas para soportar el poco espacio disponible en la diminuta barra. Los margaritas bien, fuertes, pero bien. Lo mejor de ellos fue el acompañamiento con una generosa ración de nachos con 2 salsas de la casa que nos pusieron (los nachos son como los de una bolsa del supermercado, no os hagáis ilusiones)
Después de que nos tocase la lotería, se quedó libre una mesa de 2 personas cuya reserva llegaría una hora más tarde. A pesar de que los camareros son bastante malos, eran muy simpáticos y no dudaban en ningún momento en hacer un pequeño espectáculo con los cumpleaños que se estaban celebrando.
La carta tiene un tamaño bastante bueno, hay de todo. La única pega, si la hay, es que ¡no se entiende nada de casi ningún plato! Pero a eso vamos a este restaurante ¿no?
No cabe duda de que el punto fuerte de este restaurante es la comida. Siguiendo tradicionales recetas mexicanas, encuentras una gran variedad de platos que son muy difíciles de encontrar en otro sitio de la ciudad. A pesar de que no destaca la abundancia de platos picantes, todo son platos típicos de distintas zonas de México, muy buenos y a buen precio.
Nosotros nos pedimos unas quesadillas clásicas de entre los 3 tipos que había:
Y un plato muy curiosos que habíamos visto en otras mesas: el molcajete.
Estas dos fotografías del Molcajete son de mi teléfono móvil, perdonad la calidad. Pero en internet podemos encontrar fotos sobre este plato:
Este curioso y pintoresco plato se presenta sobre una roca volcánica tremendamente caliente. Consta de una mezcla de carne y pollo en una salsa roja de frijoles con queso gratinado encima. Esta mezcla sirve de relleno para una serie de tortas caseras de maíz que te sirven a la vez. Es decir, es una especie de relleno muy bueno para un burrito-fajita. No destaca por su contenido en verduras, pero aun así lleva pimientos fáciles de encontrar pero difíciles de separar.
La comida es un notable sobresaliente. Lo que consideramos una lástima es que el restaurante pierda gran parte de su encanto por el diminuto local en el que se aloja, y la barata decoración que los adorna. Totalmente recomendable, pero reservad con MUCHA ANTELACIÓN (2 Semanas para reservar en fin de semana)
De precio: entre 2 y con platos a compartir, menos de 20€ por persona (La comida) 6€ el Mojito.
